Eternal Night
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

Mi historia de amor.[Len x Kaito]

Ir abajo

Mi historia de amor.[Len x Kaito] Empty Mi historia de amor.[Len x Kaito]

Mensaje por Armand Jue Ago 05, 2010 5:07 pm

Relato de lo que sentia len cuando su amor no era tomado en cuenta.

Siempre amando a kaito...a pesar de que este no lo correspondiera, hasta el momento en que ya su corazon no pudo mas...

Lenxkaito

Vocaloid fanfic:

Mi historia de amor.



Siempre me he preguntado, porque nosotros no podemos compartir más felicidad de la que ya poseemos.

¿Acaso siempre tendrás que ser solo mi onii-chan querido?, ¿por qué no logras verme como algo más que tu hermanito menor?

¿Algún día cambiaras aquella manera de pensar?...eso es lo que pido noche tras noche.

Deseo que mi corazón está completo y no duela como lo hace ahora… cada vez, cada día que estamos juntos en familia y tú me abrazas como es tu maldita costumbre ...yo quiero morirme, mi corazón late de una manera que no puedo controlar y temo que tu lo sientas y me pregunte que me ocurre… no sabría que decirte.

Ahora…nuestra semana de grabaciones ha llegado y estamos separados, tú cantando con Miku…como me da celos mi hermanita, pero no soporto verla siempre pegada a ti, acariciándote, dándote besitos tranquilamente, cosa que yo no puedo hacer.



Estoy solo…aquí ahora abandonado en nuestra casa… todos en sus respectivos ensayos y yo… nada… no deseaba nada, salvo estar solo, aunque cuando te marchaste te roge en silencio solo con mi mirada que no te fueras, pero me ignoraste y cerraste la puerta fuertemente.

Me siento mal…nunca podre conseguir tu amor… nunca te fijaras en alguien que no posee un cuerpo bien formado y que es un simple niño.

Me odio por no ser diferente, por no ser como Gakupo onii-chan o como tú mismo nii-chan, quien ya posee un cuerpo desarrollado.



Las horas pasan y cada vez me siento peor, no he podido ningún minuto que pasa dejar de pensar en ti, mis ojos ya me duelen de tanto llorar, pero no creo que a ti te importe.

Ya cerca de las 8 de la tarde suena el teléfono de casa… por un segundo mi corazón se acelero y corrí lo más rápido que mis piernas me lo permitieron para coger el teléfono, porque creí que serias tu, pero no fue así, la linda voz que escuche al otro lado del auricular era la de mi querida gemela, quien estaba preocupada por mí y mi comportamiento y me estaba invitando a una fiesta que habían realizado por el fin de una de las grabaciones.

-perdón Rin… no deseo ir… pásalo bien, yo…me quedare viendo televisión.-

Esas fueron mis palabras y luego colgué, dejando una frase sin terminar en la boca de mi hermana que no supe cual era, bueno, tampoco me importaba.

Como supuso que ya no regresarían temprano, decidí acostarme, que mas iba a hacer, además ya estaba haciendo frio en la sala para estar tirado sobre el sillón cambiado a cada instante el canal.

Subí totalmente desanimado a mi habitación…sin ni siquiera encender la luz, saque mi polera y shorts y me puse mi pijama, tirándome sobre la cama boca abajo, por alguna razón volvieron a brotar mis lagrimas…y su rostro volvió a hacerse notar en mi mente, como poder olvidarle, si era lo que más quería... siempre ver su sonrisa me bastaba para que mi día fuera maravilloso, pero también doloroso.

Mi pecho volvió a doler…mis ojos enseguida de pusieron rojos…estaba hecho un ovillo en la cama con la almohada abrazada, sintiendo el tic-tac del reloj que hacía notar el paso del tiempo.

Era dolorosamente aburrido estar solo, sin siquiera poder oírle, quizás el ni siquiera estuviera pensando en mi y eso era lo que más me hacia entristecer, el pensar que el ni siquiera me recordase…

De pronto todo mi deprimente silencio fue roto por sonidos muy extraños en la planta baja, me quede en silencio, escuchando con atención, lo que parecía el ruido de algún vidrio romperse, me asuste, no puede evitar contener la respiración para no hacer ruido y que supieran de que había alguien…trate de hacerme uno con la cama, pero sabía que era imposible, mis ojos ahora aparte de llorar por mi amor hacia mi onii-chan, lloraban además de miedo en aquella profunda oscuridad que reinaba en mi habitación.

Sentí como unos pasos acelerados subían las escaleras, mi terror incremento, mi corazón latía tan fuerte que pensaba que podrían sentirlo desde el pasillo.

La puerta de pronto fue abierta y yo me quede inmóvil sin ni siquiera respirar, con mis ojos bien cerrados.

-¿Len, estas despierto?-esa voz, mi corazón se acelero el doble, levantando mi rostro algo confundido y le veo a él en el marco de la puerta, respirando agitado ¿acaso… se había venido corriendo? ¿Pero...porque?

-¿onii…chan?-susurre asustado y aun llorando, cosa que noto Kaito pues se aproximo rápidamente y me estrecho entre sus brazos, sintiendo su peculiar aroma que me volvía loco, además de un suave aroma a chocolate, por lo visto había estado comiendo helado como era su costumbre.

No me quería separar de él, estaba tan cómodo entre sus brazos, pero él lo quiso así y me miro al rostro, note su preocupación enseguida…pero no la entendía.

-¿Qué ocurre kaito onii?- mi voz sonaba entre cortada a causa del llanto, mis ojos estaban brillosos.

-Yo… estaba preocupado por ti…pues…la luz…-me decía estrechándome fuertemente entre sus brazos.-La luz se ha cortado y pues como se que tu…

-¿Eh? Pero yo la tenia apagada…-susurre despacio, rodeándole con mis finos brazos por su cintura tímidamente.

-Pero se ha cortado…pensé que estarías temeroso y me preocupe…por eso vine lo más rápido a ver como estabas y me preocupe al verte llorando…-limpiándome las lagrimas con sus suaves y tibias manos- si no es por miedo…entonces …¿Por qué lloras Len?

Esa pregunta... porque la tuviste que hace onii-chan, no sabía que decir, escondí mi rostro en tu pecho y solo pude entregarme nuevamente al llanto descontrolado que había tenido toda la tarde.

Sentía como acariciabas mis cabellos…pero me sentía mal.

-Vete…gracias por preocuparte, pero…vete…sigue divirtiéndote, ve…-susurre entre llanto. ¿Porque decía eso si era lo que menos deseaba?

-No me iré-le escuche decir, mientras sentía que tomaba mi mentón y me daba uno de sus tiernos y dulces besos en mi frente, no pude evitar que mis mejillas se sonrojaran y mi corazón latiera aun mas y mas, al borde de sentirle casi salir por mi boca.

-Onii-chan no te preocupes estoy bien…-volví a decir.

-¿Qué estás bien? Por favor Len…¿ a quién tratas de engañar? llevas semanas en un estado que no es habitual en ti. ¿Dónde está mi lindo Len risueño? ¿Dónde está mi pequeño infantil?

-¡Ya basta!...por favor…deja de verme como un niño…-no pude evitarlo…no soportaba escucharle tratarme así.-yo…yo deseo dejar de serlo, me odio por tener este cuerpo, ¿acaso no te das cuenta Onii-chan, acaso eres tan ciego para ver lo que me pasa?-decía llorando descontroladamente, aferrando fuertemente su abrigo.

-No…no soy ciego Len, pero…-le escuche decir suave, sintiendo como acariciaba mi mejilla y luego tomaba mi rostro para mirarme con una sonrisa tan bella como todas.- Se que no dejas de mirarme, se que el sentimiento que sientes hacia mí es más que de hermano, pero eso está mal…por eso te trataba igual que a todos, aunque sabía que te hacia sufrir, pero estas últimas semana tu depresión fue mayor…y no eh sabido que hacer.

-¿Porque…porque no podemos estar juntos?… ¿por qué?-susurre entrecortado, aun llorando.

-Porque somos hermanos, porque somos hombre…-decía tranquilamente sin dejar de acariciarme.

-¡Entonces no tengo razón para seguir viviendo esta inútil vida!-solté de pronto ya más que furioso conmigo mismo, separándome y levantándome para disponerme a salir de la habitación, pero sus brazos tan fuertes me atraparon y tiraron nuevamente contra la cama, esta vez quedando debajo de él, mi respiración ahora era la agitada, mis ojos abiertos lo mas que podían… sorprendido, mientras que Kaito a sujetaba ambas de mis manos con una de las suyas.

-No digas estupideces…no sabes a mi cuán difícil también me ha resultado esto-

Escucharle decir esas palabras, que pasaron una tras otra en mi mente…mirándole sin entender o sin querer entender…me hicieron por unos segundo dejar de respirar…

-¿Acaso tú también eres ciego Len?…Mi pequeño y preciado Len, tu eres lo más importante y sé que mis sentimientos por ti están mal, por eso he intentado día tras día de olvidarte, pero tú me lo haces tan difícil…y cuando pensé que lo había logrado, vi como te derrumbabas…y eso realmente me dolió pues era mi maldita culpa. Te amo Len… te he amado desde el mismísimo día en que mis ojos te vieron, ahora lo sabes, ya me canse de ocultarlo…no quiero verte más en este estado…deseo ver tu sonrisa y me importa muy poco lo que digan y si se interponen en nuestra relación porque ya estoy cansado de ocultarla…dime algo por favor…

Por favor si esto era un sueño, yo no deseaba despertar, le miraba incrédulo, escuchando sus palabras, apretando mis puños a su abrigo…llorando de felicidad, sin poder soltar palabra alguna…solo… solo atine para darle como respuesta un tímido beso.

¡Ah! Sentir sus labios, me hicieron casi morir de alegría, pase mis brazos por su cuello y le volví a besar… era la primera vez que sentía sus labios contra los míos y realmente eran tan dulces…no quería dejar de besarle, pero así fue pues me falto aire… le mire tímida y nerviosamente al rostro, viendo su bella sonrisa y esos ojos que me volvían loco…

De pronto mi cuerpo tembló al sentir como una mano de él se metía bajo mi pijama, y acariciaba mi vientre suavemente…su mirada ahora se veía nerviosa y sus mejillas se habían teñido más de un suave color rosa.

Acariciaba lento mi piel…yo cerrando mis ojos y entregándome a sentir aquellas caricias que me volvían loco…subió su mano hasta una de mis tetillas y piñizco suavemente, logrando sacarme un gemido, que rápidamente quise acallar, mordiéndome mis labios… pues había comenzado a acariciarlos, a tortúralos de una manera que solo hacía que mi boca sacara gemidos vergonzosos.

-No los acalles Len…déjame oírte-me susurraba tan seductoramente que me era imposible hacer lo contrario… mi boca a pesar de que no quería comenzaba a sacar gemidos altos… producto de las caricias que sentía en todo mi cuerpo, ahora también en mi entrepierna... donde en el instante que sentí aquella mano, arquee mi espalda soltando un gemido con su nombre…

-kaito…ahmm-no dejaban de salir de mis labios, sus manos masajeaban mi miembro a toda su largo…sintiendo como me despojaba de toda mi ropa, quedando completamente desnudo ante sus ojos, que me examinaron completamente, deteniéndose en mi parte baja…en mi miembro.

Mis mejillas estaban más rojas y no podían haber subido más aun, la sangre la sentía hervir en mi cuerpo…sentía que moriría de un momento a otro por aquellas emociones que estaba viviendo por primera vez.

De pronto sentí como la lengua de kaito comenzaba a lamer mi pecho… bajando hasta mi vientre, delineando mi ombligo, escuchando mis propios gemido que se incrementaron cuando su boca se apodero de mi miembro, abriendo mis ojos sorprendido.

-kaito… eso…ah…esta…su….cio…-decía entre jadeos avergonzado con lo que estaba haciendo, pero no logre que mi onii me dejara, pues parecía gustarle mucho…sus manos acariciaban mis piernas, que las había separado y él se había acomodado entre ellas…lamiendo mi miembro, succionándolo sin detenerse a mis protestas infantiles.

A pesar que de mi boca salían protestas a que se detuviera, mi cuerpo deseaba por más…aunque sentí miedo cuando note como su mano se metía bajo mi cuerpo y se ubicaba justo en aquella zona… mi entrada, y comenzaba a rozarla, haciendo una suave presión…

-¡Kaito!-dije asustado…recibiendo solo una mirada...pero luego su boca se separo de mi miembro y escuche su voz que me tranquilizo.

-Deseo hacerte mío… pero si quieres que me detenga lo hare mi amado Len-ante aquellas palabras mi corazón enloqueció y comencé a negar con la cabeza, mientras mis ojos soltaron lagrimas que eran de alegría… pues lo que siempre había deseado, el pertenecerle a la persona que mas amaba se haría realidad.

Note la sonrisa en el bello rostro de kaito… y le vi volver nuevamente a posesionarse sobre mi miembro y lamerlo como si lamiera un helado, mientras sentía como su dedo iba asiendo presión e iba adentrándose en mi interior, siendo víctima de un gran dolor…

-ah… duele…

-ya pasara mi Len…-escuche suave…

Sentía como su dedo se movía en mi interior y luego le hacía compañía otro… sintiendo como mi cuerpo se llenaba se placer.

Pronto el tercer dedo acompaño a los otros dos… moviéndolos en círculos haciéndome caer en el más profundo placer… soltando gemidos que ni yo en mi vida pensé que sacaría.

-¿Estás preparado amor?-le escuche decirme, y yo solo atine a llevar mis manos a su cabeza y enredar mis dedos en sus azulados cabellos.

-S-siii-solté entre jadeos, sintiendo como sus dedos eran retirados con suavidad de mi interior, notando también como se quitaba rápidamente sus pantalones y bóxers, volviendo a acomodarse entre mis piernas, esta vez tomándome de la cintura para elevarme un poco y apoyar su miembro erecto contra mi orificio… cerrando fuertemente mis ojos, mientras kaito iba adentrándose .

Nos estábamos volviendo uno solo… sentía nuestros cuerpos apegados, su respiración agitada contra mi rostro… su corazón latir tan acelerado como el mío…escuchando sus gemidos mientras se introducía y metía ya todo su miembro en mi cuerpo…permaneciendo inmóvil unos instantes…

-eres tan estrecho… me lo estas ahorcando amor…-le escuche susurrar entre una nerviosa risita, mientras comenzaba a moverse…dentro y fuera…dentro y fuera… este ritmo que iba acelerándose a cada instante y hacia que mi cuerpo lo sintiese como si estuviera quemándose y de un instante a otro no pude aguantar más y estalle contra su vientre, soltando toda mi semilla... mientras mi boca sacaba una sensual melodía al momento del orgasmo que había tenido, sintiendo aun a kaito moverse, cada vez más rápido y profundo...

Sintiendole luego también soltar un largo gemido, mientras este arqueaba su espalda y me llenaba de su semen…sintiendo como los chorros de estos llegaban hasta el más profundo rincón de mi cuerpo…

Nuestros cuerpos por largos minutos estuvieron apegados, tratándose de relajarse…nuestras respiraciones agitadas…el tic-tac del reloj…y la completa oscuridad era nuestros acompañantes en este momento.

Una suave queja de parte mía, le dio a entender a kaito que ya debía salirse y así fue… dejando tras su salida el correr de su semilla con gotitas de sangre que corría por mi entre piernas…

Kaito se acomodo a mi lado, abrazándome contra su cuerpo, besándome, acariciando mis cabellos…pasando un largo rato… que parecían eternos, hasta que su voz resonó en el silencioso lugar.

-Amor… vayamos a ducharnos… están prontos a llegar…

Aquellas palabras me indicaron que esto había llegado por el día a su fin…fue así que a regañadientes me puse en pie y me propuse ir al baño solo, pero rápidamente los brazos de kaito me tomaron y este me llevo al cuarto… preparando todo en la completa oscuridad que nos rodeaba…abriendo la ducha donde nos metimos los dos... entregándonos nuevamente en el mutuo amor que sentíamos y ya no ocultaríamos mas.

Finalmente volví a ponerme mi pijama y kaito su ropa y nos recostamos en mi cama, abrazándome a el... mientras él me cantaba una canción suave para dormir...cayendo victima enseguida del hechizo de Morfeo…y comenzando a tener dulces sueños, donde solo kaito y yo éramos los dueños.

No sé a qué momento Kaito también se entrego al cansancio y se durmió, pero le sentía a mi lado…

Estaba feliz, muy feliz.

Tampoco puedo decir con exactitud a que momento llegaron los demás, pero solo se por parte de Rin quien al día siguiente me abrazo y beso con felicidad, sin saber yo el porqué hasta que ella me lo susurro a mi oído.

-Estoy feliz de que ustedes dos…se pusieran nuevamente de buenas…anoche lucían tan bellos durmiendo juntos…estoy feliz por ti Len.



Fue así como mi felicidad de un momento a otro llego y hasta ahora…en el momento en que finalizo esto, estoy junto a kaito, solo Rin sabe lo nuestro y nos ha apoyado desde ese día.

Solo he querido que mi historia la supieran ustedes para que se enteraran de la tristeza que mi vida había sido hasta el día en que el revelo sus sentimientos.

Gracias por leer mi Historia.

Len kagamine.
Armand
Armand
Licano
Licano

Cantidad de envíos : 28

http://zonayaoi.blogspot.com/

Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.