The Hell`s back **PRIV**

-Uhmm...-dije dejandome hacer saboreando sus labios y luego aquella manera de besar mi cuello. Me retorci un poco mientras su mano recorria mis piernas y se acercaba a mi intimidad...-si...lo eres-afirme con un hilo de voz...-pero no puedo evitar sentirme asi, desearte con todas mis fuerzas.-me quede en silencio, no tenia caso decir mas, Laurent era un demonio, al que lo que yo pensara o sintiera no tenia porque importarle, ademas siempre que habia tomado mi cuerpo lo hacia pensando en ella.

-Yo...espera-dije detuviendo su mano- yo no puedo, no se hacer esto...-me hice un poco para atras.

Ésta vez estaba cooperando, su cuerpo reaccionaba ante algo placentero y sabía bien que, siendo un hombre, esos impulsos eran difíciles de detener. Nublaban tu mente y te hacían querer conocer el final del cuento.
En su caso, aquél ser era un festín que saciaba su apetito destructivo. Y ésta vez, el círculo se completaba.

—Shhh... — volvió a acercarlo sin permitir que su deliciosa inocente presa escapara. —...pues entonces no lo hagas, y disfruta sin saber nada. No lo necesitas— susurró suavemente en su oído. Su voz era serena, hermosa. Uno de sus trucos. Soltó los cabellos de Rem que estaban por quedar sueltos y dejó sus hombros descubiertos.
Lo recostó al final, lamía sus tetillas y las acariciaba. Era placentero... y seguro para el otro también. Su concentración era tal que en su mente sólo había deseo.

Mis cabellos se quedaron sueltos, ondeando sobre aquella tumba y yo quede acostado con èl devorando mis tetillas con habilidad que me arrancaba suaves gemidos. Era demasiado sensual, un demonio lujurioso que desbordaba todos mis sentidos y que hacia que solo deseara que me poseyera.

-Tomame...no soy tu juguete,pero esta noche no deseo nada mas que complacerte, que hacerte sentir todo este fuego que se consume en mi cuerpo, me derrito por sentir tu lanza traspasandome...-dije con las mejillas enrojecidas por la excitaciòn y la boca entre abierta para arquearme un poco como si deseara que me comiera entero. Le jale por las solapas solo para besarlo ardiente y le saque la camisa con desesperaciòn besuqueando como bien pude aquella blanquecina piel.

Abrió los labios para dejarle explorar, su cara varonil y completamente adulta contra la de aquél jovencito rebelde. Rió interiormente por el estado de excitación en el que se encontraba el otro, ya que nunca lo había visto así. Le jaló los cabellos para besarlo con un poco de rudeza y un mucho de pasión.

—¿Tú con iniciativa? Me agrada— ronroneó mirándolo a los ojos antes de meter una mano en su pantalón, tanteando el terreno y apretando un poco para comprobar si estaba lo suficientemente duro con sólo sus jugueteos o necesitaba un poco más.

"Eres mío, yo te perdoné la vida y ahora me perteneces”

Mandaba a su mente como una insinuación que no parecía dicha por nadie. Bajo por su torso quitándole el pantalón para tomar su sexo y comenzar a lamer lentamente la punta de este.

Al introducirlo en su boca, notó cómo el cuerpo de Rem se estremecía mientras su respiración se volvía jadeante. Conocía el gran placer que provocaba por la notable habilidad que tenía en ese asunto. Él por otro lado se mostraba totalmente inexperto, pero con un gran hambre de experimentarlo todo.
Abrió los ojos soltando un jadeo al sentir una presión en sus pantalones, que atribuyó a su propia excitación. Acarició las piernas del otro antes de doblarlas hacia su pecho, dejando expuesta su entrada a su lujuriosa lengua que le abría con desesperación y lo repasaba a conciencia.
—No es más que el comienzo— dijo con voz afectada apretando sus nalgas y lo atrajo hacia él de las caderas.Lo observó con su típica expresión de maldad, caracterizada por la ferocidad en la mirada y la frialdad de la sonrisa. Sin embargo... había algo más... de sus ojos emanaba un siniestro brillo lujurioso. En su cuerpo con poca paciencia y comenzó a chocar contra sus firmes y juveniles nalgas.

Mis gemidos se hicieron audibles en todo el lugar cuando aquella lengua se metio en mis nalgas, me senti en la gloria,mi cuerpo respondia a cada uno de los roces que hacia en mis paredes, mis manos se crispaban,mis suculos se tensaron y mi sexo,no tengo ni que decir como estaba ante aquella orgasmica sensaciòn.

Sin màs hundio su estaca en mis colinas mientras las masajeaba y yo solte un grito ante el desgarre, no un grito de esos que sueltan las chicas,sino uno ronco y bastante propio de un hombre que esta en la cumbre del extasis. Chocaba con impaciencia, y pronto comence a disfrutarlo tambièn,muchisimo, como todo lo que aquel demonio me habia hecho alguna vez "contra mi voluntad", ahora lo hacia por que queria,pq no deseaba nada mas que eso. Mi rostro lo retrataba todo,incluso me semi incorpore para poner una mano en su hombro y usarle de palanca mientras apretaba los ojos con la boca abierta de placer.

-Aghh...es ...deli-cioso-pronuncie agitado sin dejar de colgarme y empalarme una y otra vez contra su miembro.

Lilith))

Parecio reparar por un segundo en mi caricia,pero entonces se mostro mas ansioso y pronto estuvo ya dentro de Rem, meneandose como un loco,me mordi los labios ante aquella escena, incluso pase una mano por mi propia entrepierna y la descubri humeda, una reacciòn normal cuando de Laurent se trataba.

Se abría paso sin piedad dentro suyo, dilatándolo y atravesándolo hasta lo imposible, llegando lo más hondo que no podía llegar nadie. Por suerte se trataba de un cuerpo resistente y luego de unos gritos de dolor, siguieron escuchándose sus gritos, pero ésta vez, llenos de placer y satisfacción.
Dejó que contribuyera en el juego aferrándose de sus hombros. A esas alturas, su instinto se estaba desatando lentamente y no podía seguir siendo considerado con el híbrido aunque eso era lo que quería hacerle creer en un principio.
Clavó sus colmillos entre su hombro y su cuello y aunque no era un vampiro, le gustaba el sabor metálico y dulce de la sangre pura, sobretodo, de un ser puro. La lamió de la herida con sensualidad y siguió en su oído, metiendo grotesca y también eróticamente antes de desviarse a su boca y callar sus gritos en un beso sofocante.

Estaba disfrutandolo mucho,toda su estaca me llenaba,llegaba demasiado profundo tanto que parecia imposible resistir a tanto placer cuando de pronto sus colmillos se clavaron entre mi hombro y mi cuello y lance un quejido,casi un aullido de dolor,mi sangre le inundo la boca por unos instantes y conforme se regeneraba mi herida èl lamìa, lo hizo de tal manera que no pude o no quise protestar,despuès de todo era propio de su naturaleza, y de la mia tambièn. Cualquier sonido mas que mi boca pudiera emitir fue acallado por aquellos deliciosos labios, sabian a sangre, a mi propia sangre pero los devore con ansias enterrando mis uñas cual si fueran garras en su hombro...-dime que los estas disfrutando...-pedi tras separme un poco y luego morder sus labios adueñandome de los mismos,bebiendo un poquito de su sangre,no se la habìa pedido,pero no me importo...ya nada importaba.

Otro gemido mas, y otro mas mientras nos devorabamos en besos llenos de saliva,mientras algunos de mis cabellos se pegaban a mi cara ante el calor del momento y los demas colgaban en el aire,le rodee el cuello con ambos brazos solo para dejarlo empalarme a su gusto y rozar mi sexo que se encontraba durisimo contra su abdomen sintiendome cerca de llegar...

Lilith))

Si alguien puede hacer que te revuelques de placer,ese era sin duda Laurent o Samael,como solo yo le llamaba,me ponia caliente como una caldera, y asi justamente se encontraba mi zona intima,humeda y deseosa de su hombrìa,separe las piernas sin mas y hundi un par de dedos en mi entrepierna,los lami lujuriosa,sensual y obscena a la vez para luego seguir masturbando al ritmo de sus embestidas y esa fue la imagen mental que le envie. Que si me gustaba enloquecerlo? si, bastante...adoraba esa expresiòn de placer que se pintaba en su rostro,asi como sus ojos irradiando lujuria y deseo, su actuar rudo y sanguinario,pero sobre todo esa adoraciòn que me profesaba,era correspondido,èl lo sabia pero no podiamos ser solo el uno para el otro...nos habiamos matado infinidad de amantes el uno al otro, ahh resultaba tan placentero como mirar aquella escena y que Laurent pudiera ver la mia.

Su mente fue invadiéndose con la imágen voluptuosa de Lilith... con su cuerpo desnudo y perlado de sudor, y sus dedos abriendo la puerta al paraíso y al infierno, completamente dispuesta a recibir y otorgar placer.
Un jadeo escapó de sus labios antes de aumentar el ritmo, y su propia frente y poderoso torso iban llenándose de sudor al fantasear con sus torneadas piernas, que abría para entrar en ella y en su ansiosa y resbaladiza humedad, que lo devoraban con ritmo y con hambre y lo acogían como si estuvieran hechas para ello.
Sintió que su erección llegaba al máximo y sólo quería acabar en el otro cuerpo. Su ritmo se volvió demencial mientras lo hacía botar con los brazos enredados en su cuello. Ni siquiera notó las garras del otro ni sus palabras, sino que tódo se volvió una explosión blanca que lo llenó en abundancia mientras en su cara se pintaba el mayor placer furioso que ha experiementado nadie.

Su ritmo se volvio una locura,si antes llegaba demasiado adentro esta vez senti que me partia,pero era delicioso,su rostro
reflejaba lo mucho que lo estaba disfrutando,yo no podia mas y cuando senti su eyaculaciòn,mi cuerpo se tenso tambièn y tan solo podia sentir aquel riachuelo escurrir entre mis nalgas aferrando fuerte el agarre antes de que yo mismo derramara blanquecina leche enmedio de ambos y me apretara contra su cuerpo por mero instinto. Busque sus labios,no sin antes subir por su cuello,lo hice no como una mujercita buscando amor,sino como un chico que busca su calor y que disfrutaba de ese cuerpo radiante de sudor.

Lilith)
Su mente parecio haber recibido el mensaje como esperaba,mientras que yo avoque un poco de energia en sentir las sensaciones que experimentaba Rem,que despues de todo ahora me pertenecian a mi,ya no eran 2 dedos sino tres los que empleaba y lanzaba improperios usandolos como una posesa hasta finalmente alcanzar ese orgasmo al que llegamos los tres, me relami los labios en una imagen digna de la mejor de las putas mientras abria bien las piernas para mostrar mi humedad y como mis fluidos chorreaban por mis piernas. Una sonrisita de placer se dibujo en mi cara y entonces pronuncie -Lo disfrute mucho...-de nuevo en su mente.