Caminando por el bosque [Priv. Raion]

No sabía como había llegado hasta aquel lugar, miedo se reflejaba en sus aun infantiles facciones a la oscuridad tan profunda del bosque, por lo que se sentó junto a un gran arbol y abrazandose a si mismo.

-Shayke-san…-dijo dejando correr una lagrima por su palida mejilla-te…tengo miedo…donde esta Shayke-san…?-lloró suavemente, sin saber que pronto su vida cambiaría drásticamente.

-me…me hubiese quedado en casa…así no estaría perdido…quiero regresar…-dijo aun sollozante, mas unos segundos después la temperatura del entorno bajo abruptamente.

Las lagrimas no se detenían y si hubiese estado más pendiente de su entorno, podría al menos haber caminado un poco más, pero se había quedado ahí, sin hacer nada más que llorar, pero lo que no se esperó fue escuchar aquella oscura voz.

-qui…quien está ahí?-pregunta con voz temblorosa, levantándose de su lugar y girando hacia donde venía la voz.

Retrocedió lentamente, sin apartar su mirada llena de ahora pavor y su corazón latiendo completamente desbocado, debía escapar lo antes posible, sin embargo, al verle salir de las sombras, tropezó con una raíz y cayó al suelo.

El miedo lo atenazaba cada vez más, pero lo que le hizo temblar como una hojita, fueron aquellas ultimas palabras-po…por que dice eso…yo no he hecho nada malo-dijo volviendo a retroceder esta vez sentado, hasta que sintió el tronco de otro árbol en su espalda, ahora si que no podía escapar.

Sus aterrorizados ojos aun le miraban acercársele, por lo que inconcientemente trató de retroceder pero el árbol le impedía hacer tal cosa, miró hacia donde podría escapar, mas pronto estuvo a bastante altura del suelo-su…suéltame!-gritó y pataleó, pero el golpe contra el tronco había sido duro.

De repente sintió frío y al recuperar un poco sus sentidos, se dio cuenta de que su ropa estaba hecha jirones-que…que piensas hacer?…-pregunta volviendo a lanzar patadas, la cuales no parecían lastimar al mayor…-no…por favor…déjame ir…-cristalinas lagrimas comenzaron a rodar por las mejillas del peliblanco.

Ya no era miedo lo que la mirada del chico reflejaba, ahora era real pavor lo que sentía Raion hacia el castaño, ya que nadie aparte de Shayke le había tocado de aquella manera, sin embargo, a comparación de su primera vez, las manos y labios de Scott le hacían daño.

-no lo hagas…no…por favor déjame ir…-rogó nuevamente, no quería ser marcado por otro que no fuese su tierno Shayke, pero nada podía hacer para que el mayor le quitase las manos de encima, aunque tampoco podía evitar que su joven cuerpo reaccionara a los toques del ojiazúl, por lo que tuvo que morderse duramente la lengua, al tiempo que las lagrimas continuaban corriendo.

-“oh por favor…Shayke…lo…lo siento…”-pensó apenado y avergonzado, sin saber siquiera si saldría vivo al menos de esta situación-de….ahhh….detente…-dijo con un gemidito entremezclado, tratando de mantenerse al menos sin emitir esos desgraciados sonidos.

No dejaba de temblar ni llorar, pues su cuerpo era un hervidero de rabia, odio, impotencia, dolor y completa vulnerabilidad, sentimientos que nunca o casi nunca sentía, si embargo,esta situación era sumamente dificil de asimilar para Raion, quien tuvo que morderse hasta el alma, para no gritar por culpa de los invasores en su cuerpecito.

Cerró los ojos fuertemente, dejando que las lagrimas continuaran su caer, mas cuando el mayor introdujo un tercer dedo, un lastimero y quebrado quejido se le escapó desde lo más profundo de su ser-qui....quitalos!...duele-rogó-Sha...Shayke...per...doname...-dijo al aire, esperando que el viento le llevase aquellas palabras a su amado.

Estaba cediendo y ni siquiera estaba siendo penetrado con el miembro del contrario, cosa que le hizo tener aun más miedo del que ya tenía, no quería pensar en como dolería cuando aquello sucediese, quería morir, no sabía como miraría a los ojos a su novio, a quien estaba siendole literalmente una basura de persona, el corazón del chico se rompió al pensar en la reacción y el rechazo a su persona por parte del pelilargo-"Shayke...perdoname en serio..."-pensó con los ojos aun cerrados y comenzando a jadear y gemir, aunque no quisiera hacerlo.

Dolor, vergüenza, auto repudio sentía, era una mescla extraña en su corazón, se maldecía sin mediar palabras, no quería seguir sintiendo, deseaba morir, dejar de llorar, de ser una existencia.

-basta…basta…no más…por..favor…-rogó nuevamente, mietras que con repugnancia se dio cuenta de que le comenzaba a gustar y su cuerpo se acoplaba a aquellos dedos que pronto lo abandonaron, causando que una descarada e imprudente protesta se le escapara, para luego sentir como el miembro del demonio lo invadió de tal manera que en un comienzo, solo se curvó con los ojos completamente abiertos, pero después un doloroso quejido se le escuchó.

-no…no lo ha…ahhhhh…no lo haré…quítate!!!!....duele…-con sus manos comenzó a luchar con el otro para tratar de quitárselo de encima, pero no lo lograba, estaba débil y las embestidas lo estaban haciendo ceder aun más a aquel juego tan desgraciado-mal….nggg…maldito…-le dijo lloroso.

Era mentira, su cuerpo no podía estar aceptando aquel humillante trato, sin embargo, el demonio tenía razón, por que?, no lo sabía ni tampoco quería saberlo.

Nuevos gemidos se le escaparon de la garganta, no podía detenerlos y eso no le gustaba, quería regresar a los brazos de su amado, mas no sabría enfrentarlo.

-no…ahhh…no lo hagas…bas…basta…nnnngggg…-no podía creer que existieran criaturas tan insensibles, tan malditas-AHHHHHH…MMMM…YA….NO…-el aumento de las embestidas fue sorpresivo, a raudales caían las lagrimas por su fina piel y los gemidos y jadeos estaban cambiando a aquellos que denotaban placer, no podía entender como comenzaba a disfrutarlo, pero se sentía bien, demasiado bien…inconcientemente rodeó la cintura del contrario con las piernas, cerrando el cerco y haciendole entrar aun más-AAAAAMMMM…-intenso, salvaje placer era el que crecía en su interior, pero lo odiaba, odiaba que le gustase.

-“a…amor…disculpame…”-pensó para Shayke, mientras cerraba los ojos y de sus labios seguían escapando aquellos desgraciados…moría por dentro, su alma se quebraba de tan solo pensar en su actual situación, terminó por rendirse, pues quería que se terminara, no le importaba “morir” de esa manera y quizás su pareja lo rechasaría por esto.

No, así no era como sentía, no era él ya no, ya no sonreiría-me…mentira…no me gu…ahhhh…no me gusta…-santía como algo calido escurría de su entrada, era sangre y pronto sería algo más-de….ahhhh…detente!!!! me due….duele…me duele…-no solo su cuerpo dolía, su corazón era lo más dañado, no solo por esta situación, si no que porque ya no podría mirarle a los ojos sin sentirse sucio, cerró sus ojos sintiendo como las lagrimas no dejaban de caer, ahora recordaba, él era…fértil.

Pronto sintió algo en su vientre, la misma sensación que le había hecho sentir Shayke, se mordió loas labios y llegó al orgasmo, mas no gimió, siguió mordiendo sus labios hasta que terminaron los espasmos…abrió sus ojos, pero estos habían perdido el hermoso brillo que los caracterizaba, había perdido quizás más que su inocencia que aunque su primera vez había sido con shayke y había sido hermosa, ahora se sentía vacío, ya no le importaba nada ni siquiera su vida…y selló su mirada, no vería más, ya no, jamás volvería a ver…

No lo miraba, no hablaba, no hacía nada, solo dejaba que aquel demonio lo mancillara como si fuese un simple objeto, volvió a cerrar los ojos dejando que más lagrimas surcaran su rostro-arg…-se quejó al sentir la fuerza con que movía las caderas.

Cuando el demonio abandonó su interior y lo giró dejándolo en cuatro, Raion pudo sentir como el semen del mayor escurría desde su ano, calido pero repugnante eran los adjetivos que calificaban aquella aberración de criatura-AAAAAAAAAH!!!!...n…no!!!...dejame…dejame…-lloraba al ser nuevamente penetrado con aquella fuerza, le estaba lastimando demasiado, no solo su interior, si no que también su alma, su pureza, su inocencia.

Sus pensamientos viajaron hasta su amado amo, que al “verle” de esa manera, hizo que su corazón coliese aun más, que su deseo de morir fuese mayor-“Shayke…per…doname…”-fue lo ultimo que pudo pensar, pues los desgraciados gemidos escapaban sin control y nuevamente se corrió en un intenso orgasmo-ya…ya no más…-pidió con angustia.