Moonlight (Libre)

-¡Largo de mi local pequeña mierda!-una mano blanca y grande se cerró sobre el cuello del neonato, un vampiro recién nacido por su aspecto casi todavía vivo y la carencia casi absoluta del aroma profunda y atrayente que envolvía a los bebedores de sangre más antiguos.

La alta y encandalosa música se interrumpió, muchas de las parejas que estaban ondeando sus cuerpos en al amplia y circular pista se detuvieron al ver al propietario de la discoteca agarrando a uno de los alborotadores que no se le había ocurrido nada mejor que comenzar a gritar en voz alta la opinión que le valían los lycanones, en tono peyorativa y escupiendo al suelo. Natham no le hubiera dado mayor importancia al asunto si no fuera porque el vampiro se atrevió a romper dos copas de fino cristal veneciano y golpear a uno de sus camareros, un joven lycanos de estatus inferior.

Natham, molesto, se había puesto en pie, enfundado en su pantalones de cuero negro, su camisa ajustada del mismo tono con el cuello en V y unas lentas azules sobre sus ojos turquesas. Sin ninguna palabra lo agarró por suaves cabellos y lo estampó con brutalidad contra una pared para luego agarrarlo por el cuello, apretando mientras escuchaba las vértebras ceder bajo su agarre implacable, sonrió.

-Me reservo el derecho de admisión, hijo de puta...-lo alzó en vilo y comenzó a caminar hacia la salida mientras todos le cedían el paso a su musculosa e imponente figura.

Las puertas de tono plateado y negro con lunas llenas grabadas se abrieron y Natham lanzó a un charco de agua sucia al joven vampiro-si vuelvo a ver tu cara te arrancaré los cojones y me los comeré..¿he sido claro?-sus labios se separaron para mostrar apenas sus blancos colmillos y los ojos de tono aguamarina relucieron bajo sus lentes.

*Pasaba por el lugar ya que tenía algo de hambre y con el collar mágico podía comunicarme con todos los habitantes de este lugar, pero veo a alguien de lejos tirado en el suelo muy herido y otro entrando al local, temía que estuviera herido así que rápidamente me acerco donde el herido a pesar que él me dijo que no le ayudara, solo lo abrase para transmitirle mi energía curativa cubriéndolo de una luz blanca logrando curarle todas las heridas y moretones que tenia, el vampiro me agradeció y se fue corriendo diciéndome de paso que también me fuera de aquí pero yo no entendía el porqué, aunque era tarde ya que ese acto de caridad logro que llame la atención a varias personas que pasaban por aquí y yo no dije nada por lo tímido que era*

Natham ni siquiera había mirado que estaba pasando a su espalda hasta que el portero del local lo tomó de la mano e hizo un movimiento con la cabeza para que mirara en el dirección que lo estaba haciendo él. Natham arqueó las cejas y se giró, justo para ver a aquel enclenque muchacho curando al vampiro entremetido que él mismo acababa de echar del local. ¿Cómo se atrevía?

Se movió deprisa a pesar de su enorme altura y su cuerpo musculoso, podía parecer más lento por ser ancho de espalda y de pecho pero nada más lejos de la realidad, estaba al cien por cien de todo su potencial en forma humana. Sus cabellos platinos relucieron en el aire y sus orbes turquesas destellaron tras las lentes azules. Su mano blanca y grande agarró los cabellos de aquel joven y tiró hacia atrás para que curvara su cuello y que los ojos del muchacho se clavaran en los suyos.

-¿Cómo te atreves a entrometerte?-lo fue izando en el aire por las finas hebras para colocar su rostro a la altura del suyo-Nadie toca a mis presas..-acercó su cara y le olió el cuello delgado, retrocedió y una risa ronca manó de sus labios-angelito...-le mordió un hombro flaco hasta hacer sangre y lo dejó caer al suelo-escucha mierdecilla celestial, no estoy de buen humor en este momento..-se quitó las lentes para que viera sus ojos.

-¿Sabes?..creo que no eres muy listo al venir a un lugar como este..-lo tomó de una mano y comenzó a caminar hacia la discoteca-..ahora tienes una deuda conmigo por meterte donde no debías, aprende de esta lección.

*Queria irme de aqui porque sentia que algo malo iba pasar y al intentar pararme sentia como alguien me tomaba de los pelos y me jala haciendo que mi rostro quedara frente a frente al de aquel extraño, solo estaba asustado*Perdon, yo..yo solo queria ayudarlo y porfavor... sueltame me esta lastimando...

*Miraba como empezaba a olfatear mi cuello y me puse nervioso, queria que me soltara; no entendia porque lo estaba maltratando ademas estaba perdido y queria buscar al vampiro que lo salvo en la subasta*

-AHH!!!*Gemi de dolor al sentir como aquel extraño mordia mi hombro, me salian lagrimas al estar tirado en el suelo, me tocaba el hombro ensangrentado intentando curarlo pero no queria hacerlo, por ahora no debia sacar sus poderes por ahora no*

-A donde me lleva.., yo no tengo nada de deudas contigo; le dare algo que quiera pero suelteme porfavor*decia mientras intentaba que lo soltaran aunque decir su ultima palabra fue un error no sabia nada de este lugar y temia que lo lastimen de nuevo como en la subasta*

Natham hizo oidos sordos de sus súplicas, cuanto más hablaba más ganas tenía de gopearlo hasta quebrarle todos los huesos del flaco cuerpo. Odiaba la debilidad, era algo que parecía estúpido e inútil, en el mundo de los licanos no había lugar para la fragildad a menos que fueras un cachorro y entonces se justificaba. Lo siguió halando al interior del local, llevándolo hasta su lujoso oficina donde lo arrojó al suelo que estaba cubierto por una gruesa y lujosa alfombra.

Fue hasta el escritorio y tocó un interfono-traélo..-se sentó en el borde de la mesa, cruzando sus largas piernas y encendió un cigarro mientras sus ojos turquesas se posaban en el joven de ojos llorosos, con pura indiferencia.

La puerta se abrió y entraron varios se sus subordiandos, entre sus manos llevaban al joven licano que había sido golpeado por le vampiro, su cara estaba amoratada y presentaba cortes en un brazo y estómago.

-cúralo..-ordenó.

*Al ser arrojado a la alfombra solo me quede inmovil, queria irme de aqui y esconderme para despues salir a buscar a alguien.Mirando al señor hablar con un extraño aparato solo miro la puerta y veo que entraban varios señores con un chico herido y por una razon mi miedo se fue ya que me preocupaba el joven herido pero si lo ayudaba frente al señor que me trajo aqui otra vez me iba a lastimar pero en verdad queria ayudar al joven*

-Si...*fue lo unico que dije cuando me acerco a abrazar al joven, el cuerpo de ambos empieza a brillar de color blanco hasta que las heridas y moretones desaparecieron, dejo de abrazarlo regresando al sitio donde estaba cuando me trajeron aqui*