Vagando sin destino

Llevaba un buen rato caminando por las calles de la ciudad, aburrido y sin un destino fijo a donde ir. Pasaba la mayoría del su tiempo libre vagando por las calles de la ciudad, distrayéndose, mirando a los transeúnte, hacia cualquier cosa con tal de estar fuera de su supuesto hogar. Aquel hogar que para él no era más que cuatro frías y aburridas paredes, las cuales debía de compartir con una de las personas que más detestaba. Sin más que hacer que vagar, saco un pequeño reloj de uno de sus bolsillos para ver la hora, suspirando pesadamente al notar que ya era tarde y pronto tendría que volver al lugar te detestaba.

- Hm.. Que molesto es esto.. -Murmuraba con molestia al caminar a paso lento y con la cabeza gacha, mientras guardaba el reloj metiendolo nuevamente en su bolsillo- ¿Por qué de todas las personas en esta ciudad tenia que parar a vivir con él? -Se interrogaba así mismo con un claro tono de molestia en su voz, para luego suspirar intentando dejar de pensar en ello y pensando que más podría hacer entes de volver a casa- Hm.. ¿Por qué tenia que venir a esta maldita ciudad? -Se interrogo nuevamente al detenerse frente a un árbol- ¿Acaso no había otro lugar mejor? -Murmuro, frunciendo levemente el ceño al apoyar su espalda contra el tronco.

Se quedo un momento en silencio, meditando e ignorando todos los ruidos y imágenes a su alrededor, sin más que sacar un pequeño dulce de su bolsillo el cual desenvolvió y llevo a su boca de forma calmada, esperando pacientemente a que el tiempo avanzara y deseando no volver a aquel lugar.

Olor a inciensos y hierbas …

Había conseguido todo lo que necesitaba para la próxima luna llena y lo llevaba tranquilamente en su bolso colgado en su espalda, mientras recorría las angostas y húmedas calles en la oscuridad, conociendo el nuevo pueblo que ahora era su hogar y localizando algún buen lugar desolado y abierto.

escuchando sus peticiones finalmente había dado a parar en un espacio algo abierto entre las callejuelas que suponía tenía intenciones de ser una pequeña plaza donde habían unos cuantos árboles por los alrededores iluminados por la luna menguante; no faltaba mucho. Se acercó a uno de los árboles y sentó en el suelo para recostar su espalda pues había caminado todo el día y se encontraba algo cansado, sonrió complacido de que ese sería un buen lugar para cuando tuviese que realizar el ritual, miró la luna y disfrutó del clima frío mientras cerraba sus ojos, pensaba descansar allí un poco antes de volver a casa.

Escuchó una voz y abrió de golpe sus ojos al sentir que tenía compañía cerca, no esperaba que nadie llegase tan adentro del pueblo y mucho menos a esas horas, escuchó con cuidado y meditó un poco para examinar si esa persona era uno de los demonios de los que tanto huía, al no ser así se sintió aliviado.

-“Dicen que a menudo encontramos nuestro destino por los caminos que tomamos para evitarlo”- dijo luego de escuchar el murmullo de esa persona puesto que sonaba muy afligida mas no se movió de su posición y aún continuaba recostado del árbol.

Hola hola! :D esta libre?... es un placer conocerte ...soy algo nueva en esto de los foros y no estaba segura si podía contestar, si no podía borraré esto con gusto! hasta luego!