Vamos por el enano ~ [Privado. Alex & Usui]

*Después de haber salido del bar, se limpio nuevamente las manos en la ropa, de por sí ya estaba manchada. Camino con aquel aire coqueto y a la vez tan mareado, aunque decía no estar borracho (imagínense que camina como jack sparrow xD)*Hm.. Vamos, vamos... *Apuraba a sus acompañantes, mejor dicho apuraba a el felino*Rápido que el infierno no queda tan cerca... *Bromeo chasqueando sus dedos, haciendo aparecer gracias a sus sombras una botella mas de vodka. La abrió y bebió tranquilamente caminando de nueva cuenta. Camino a un callejón oscuro y desde ese lugar abrió un portal, caminando despreocupadamente a sabiendas que el otro le estaba siguiendo.* Hogar dulce hogar... *Musito al ver la entrada del infierno, acomodo su corona con elegancia y siguió caminando*Mira...Por ahí está esa persona... Dicen que era una zorra... Quién sabe si pueda salir... *Hablaba con Alex, importándole poco si los demás demonios escuchaban. Al final del recorrido prefirió guardar compostura y se inclino observando en el puente la cantidad de almas que se encontraban, llorando y gritando que les sacaran de ese lugar, que no habían hecho nada malo, que eran inocentes*Claro... Todos deberían estar en el cielo... Dio una sonrisa sarcástica sentándose en el piso, quedándose así por un buen rato, buscando con su mirada afelinada el alma del enano humano que habían conocido en el bar*Alex... tu lo vez?... *Se rasco la mejilla, ladeando la cabeza, bebiendo otro poco de su botella*Hm.. Anda, ayúdame a buscarlo, después de todo será tuyo.. *Rio unos minutos, claro que ese niño de ahora en adelante también seria como su 'hijo', pero seguía sin aceptarlo.Saco de entre sus ropas desaliñadas unos hilos y unas dagas, amarrando las dagas con los hilos* Pesquemos a tu hijo ~ *Extendió un hilo para que lo tomara el felino, observándole con una sonrisa divertida*

Le seguía tranquilamente, después de todo no había mucha prisa a pesar de que el otro incistia, le miró divertido, pues notoriamente se veía ebrio, sin embargo no comentó nada, solo le siguió, metiendo las manos en sus bolsillos mientras la esferilla de energía les seguía casi de lado //No debería tomar tanto// pensó, pero simplemente le dejó, él mismo se había puesto peores borracheras, entró al callejón extrañado, hasta que vió aquel portal, él no consideraba el inframundo su hogar, o al menos no quería hacerlo si se encontraba con aquella persona tendría que pagar lo que le debía, aun así continuó, observando de reojo a quienes el otro señalaba y riendo de forma amena y un poco sonora, de igual forma le importaba medio pepino lo que los otros llegaran a decir de ellos, se frenó al ver donde estaban, había estado antes ahí un par de veces, aquellos lamentos le sonaban a música por una parte, pero por la otra un escalofrio le recorría, pues alguna vez, se encontró entre ellos, alguna vez hace muchos años, antes de que aquél ser le salvara de quedar ahí barado, quizá por eso había querido ayudar al pequeño. Se sentó junto al rubio (¿?) dejando la esferita levitar junto a ellos, seguramente el cuerpo ayudaría a sacar el alma a flote, dejó que un poco de aquella sangre se hundiera en el mar de almas y luego tomó el hilo que le daba el otro- No bromees, me ayudarás con esto. –Le dijo volviendo la mirada a las almas, de las que veía ninguna se parecía al pequeño, suspiró y lanzó aquella pequeña daga a aquel lugar, no sin antes mancharla con la sangre del otro para que así el alma se viera afianzada- Debe ser de las mas blancas, recuerda que es inocente… -Le comentó, concentrándose en las almas mas blancas y brillosas, todas hasta que su daga se aferró a algo, sintiendo un tirón en el hilito- Eureca ~ –Sintiéndose Sócrates {{xD}} comenzó a jalar el Hilo que sujetaba, subiendo aferrada a la daga el alma del pequeño, que les miraba con cierta curiosidad e inocencia, le sonrió con cierto parecido, después de todo le resultaba bastante familiar justo como él había sido sacado de aquel lugar, lo jaló mas, separándolo de aquel mar de almas y dejó el hilo amarrado a la orilla, para que el alma flotara y no volviera aun a aquél cuerpo- Vamos, tenemos que hacerle un cuerpo ~ –Le dijo divertido, y le arrancó un par de cabellos al otro, después de todo, necesitaba algo de su material genético, se arrancó también un par de cabellos y los entrelazó con los del rubio, sabiendo como hacer esto luego de sus décadas de estudio en aquél lugar, la esfera de energía, bajó al pequeño, formándo una marca que quedó grabada en el suelo, como si una cuchilla hubiera pasado por aquél lugar, pintando un pentagrama, con un círculo alrededor, además de unos otros símbolos que se pintaban gracias a aquel sellos energético que finalmente dejó el cuerpo del menor en medio de aquel extraño símbolo- Sobervia… –Susurró y se detuvo, sin dejar de entrelazar los cabellos, miró a su compañero- que pecado deberíamos otorgarle?... - Esperó la respuesta del otro, vigilando de reojo aquella pequeña alma que estaba colgada del hilito-

*Se acomodo su corona una vez el otro tomo el hilito junto con la daga y rio ligeramente, con diversión obviamente* Si si, te ayudare con esto, aunque yo no fui quien quiso ayudar al enano....*Encogió los hombros en un acto desinteresado, cambiando el tema drásticamente se puso a tararear una canción, acompañado de los lamentos de ese lugar. Remojo la punta de la daga en la sangre del menor, como si de una tarde tomando té se tratase y sonrió de manera un tanto retorcida observando la sangre deslizarse por el filo de la daga provocando que diera una leve lamida probando la sangre del enano, seguido, la lanzo a las demás almas y siguió tarareando una canción, con calma, como si fuera algún domingo en la mañana y salías a pescar con tu hijo, solo que en este caso estaban pescando a el hijo. Rio internamente mirando de soslayo a su compañero de maldades (?) y seguido volvió a ver a las almas lamentándose, suplicando por ayuda. Escucho la voz de su amigo, pero andaba mas ocupado picando con un palito a las demás almas, peleándose para que no se subieran a su daga a falta de sangre del niño las almas aprovechaban para subir* Carajo!!.... *Grito molesto extendiendo su mano, lanzando una esfera oscura de sombras las cual al llegar un poco más al fono exploto causando que el mar de almas se hiciera negro solo por unos instantes*.....*Guardo silencio mirando el mar negro y después miro a Alex, sonriéndole con un aire infantil* y así se controlan a varias almas coladas (??) *Rio divertido acomodándose sus cabellos* Tienen suerte de ya estar muertos.... *Musito después volviendo a sentarse en el suelo, meseando su daga de un lado a otro, mirando después ya con más atención a el alma del enano* Hola!....*Saludo animado y después se quejo al ser jalado del cabello, gruñendo con molestia*Uhm... *Observo detenidamente todo lo que pasaba en el lugar, cruzándose de piernas estilo indio, volviendo a mostrar una sonrisa divertida y un tanto curiosa. Seguido se levanto cortando la palma de su mano y dejo caer gotas de sangre en el cuerpo inerte del chico, de esa manera podría estar conectado con la mente del menor y sabría exactamente donde se encontraría, debía cuidarle, ¿no? Pues eso hacia* Envidia....*Musito con una extraña tranquilidad, observando el cuerpo del niño para ver de soslayo el alma, lo bueno de todo eso, era que no recordaría el ritual, simplemente despertaría y tendría que comenzar una nueva vida, junto a los de su ‘especie’.

Se alejo después, con intenciones de acercarse al alma del enano, pero solo volvió a lanzar otra esfera negra a los demás que se lamentaban* Apresúrate o mas almas se querrán colar al cuerpo del niño.... *Si bien, mostraba expresiones divertidas y sádicas, pero estaba ayudando a que todo ese ritual fuera bien hecho, sin interrupciones de alguna otra alma o algún otro demonio, si esa interrupción llegaba a aparecer, se encargaría de exterminarla para que no tocaran el cuerpo del niño* Me gusta el nombre de Usui... *Murmuro apenas audible, mirando de soslayo a su compañero, manteniendose alerta de las demas almas*

-Supiró viendo el comportamiento de su compañero, el también quería divertirse, pero le ponía de nervios estar en ése lugar, pensaba que en cualquier momento aquel gran ser aparecería para cobrarse su deuda, así que seria mejor apresurar las cosas, pero hacerlo bien, tampoco quería que el pequeño tuviera un cuerpo hecho al aventón, escuchó a su acompañante y negó levemente, ningún hijo suyo envidiaría a nadie, o era simplemente que quería hacerlo superior a los demás, gravó en aquel círculo el símbolo demoniaco de la soberbia, justo hasta arriba del circulo, sobre la cabeza del menor como si estuviera coronándole, terminó de trenzar los cabellos e imitó a su compañero se cortó la muñeca levemente, viendo de reojo al otro que se encargaba de vigilar, supuso que eso estaba bien, de igual forma no dejaría que nadie se atravesara, el mechón de cabellos, voló hasta la cabeza inerte del cuerpo del menor y se adentró en ella como si fuera una daga, hasta que desapareció de la faz del menor, dejando un brillo rosáceo en el cuerpo, dejó caer un poco de su sangre en el circulo y el cuerpo, e inmediatamente, aquel circulo ya grabado en la tierra, se incendió en llamas, que al llegar a aquel símbolo de la soberbia, cambiaron de color, oscureciéndose hasta llegar a un color negro, que resaltaba en todo aquel averno.

Sonrió de lado al ver como todos los símbolos grabados funcionaban, quemando aquel demacrado cuerpo humano, y haciendo uno nuevo de entre las cenizas, algunas almas, eran jaladas al bortex de llamas negras, pero solo eran usadas como material para el cuerpo, quemando toda la energía que tenían para que el ritual se completara correctamente. Poco a poco, aquel calcinado cuerpo humano se fue reconstruyendo en uno mas resistente, mas fuerte y poderoso, mezclando las escencia y sangre de aquellos dos demonios que observaban y vigilaban que aquello quedara tal y como debía quedar (¿)- Un poco mas… solo un poco mas…-dijo, mediando las llamas que en vez de carcomer aquel cuerpo, lo revitalizaban, dejando ver una cabellera larga y rosada hasta poco mas arriba de los hombros, una tez clara y algunos rasgos mas finos, sonrió al ver que ya estaba concluido, solo que como todo buen herrero debía dejar que el cuerpo se enfriara solo, por lo que dejó que las llamas se extinguieran al centro, dejando un círculo de fuego negro alrededor- Ya trae el alma… –Le dijo, con una sonrisa un tanto sádica, realmente le gustaba eso.

*Se llevo la herida que se había causando minutos atrás y la lamio con gula saboreando su propia sangre, se mantenía atento en los movimientos del felino esta vez, las almas ya por fin habían entendido que no debían meterse en ese ritual ya que el demonio no les permitía ni siquiera ‘respirar’. Una sonrisa media se formo en sus finos labios al ver aquel fuego rodear el cuerpo del menor y bajo las manos dejándolas a los costados, quedándose hipnotizado mirando aquel fuego que poco a poco cambiaba de color a ese oscuro que le ‘calmaba’ pero a la vez le sumía en miles de pensamientos vanos. Entre cerro la mirada con una tranquilidad demasiado atemorizante y, las facciones de su rostro se volvieron un tanto melancólicas, deslizo su mirada felina por los símbolos antes de que estos desaparecieran estando ‘ido’ en recuerdos, quiso moverse para ir a donde estaba Alex, pero simplemente no pudo, se quedo en la orilla, junto a la pequeña alma del menor, como si este le estuviera reteniendo de la mano. Alzo su rostro solo un poco mirando como algunas almas, las mas blancas y puras eran atraídas por el fuego para ser consumidas, alcanzando a sentir una ligera brisa en ese lugar tan oscuro.*Uhm... *Bajo su rostro nuevamente al escuchar la voz de su acompañante y parpadeo unos segundos saliendo de ese transe, se llevo la mano a la herida alejándola de las almas que aun querían pelear en vano y suspiro frunciendo el ceño con un aire molesto, lanzo una nueva esfera de sombras y apaciguo ese alboroto.

Se sentó en el suelo, terminando de observar como el cuerpo de el nuevo familiar aparecía por completo frente a ellos, con esas facciones finas y ese cabello rosado, sin duda era una buena combinación de ambos, aunque se daba más aire a el, o era su imaginación. Volvió a parpadear acomodando su corona de manera elegante y distraída a la vez, sin poder quitar los ojos del nuevo cuerpo del menor*Ah... Si, ya voy... *Se levanto y camino a donde estaba el alma del niño y lo tomo entre sus manos a sabiendas que la pequeña alma del niño era demasiado débil y pura como para querer tomar posesión de su cuerpo. Se acerco a donde estaba Alex y le extendió el alma, mostrando una sonrisa media al ver la sonrisa sádica de su acompañante* Ten a Usui... Termina el trabajo... *Murmuro con calma, observando la pequeña alma que miraba de un lado a otro, manteniendo aquel aura inocente, después de todo, aun era un niño*